El vínculo con la Agencia Chilena de Eficiencia Energética nace por la iniciativa de Miguel Torres de buscar alternativas para ser más eficientes energéticamente y de reducir el impacto de la huella de carbono de su proceso productivo con el objeto de ser más sustentables y amigables con el medio ambiente.
Con el apoyo de la AChEE se detectó que el sistema de agua caliente controlado por Caldera presentaba una oportunidad de reemplazo a una tecnologías más eficientes. Previo a la medida de Eficiencia Energética implementada, las calderas sólo utilizaban Gas Licuado de Petroleo (GLP) para calentar el agua del proceso de almacenamiento de vinos en cubas de 50 m3, y el lavado y sanitización de las mismas.
La medida de Eficiencia Energética implementada consiste en un recambio tecnológico, es decir, reemplaza las antiguas calderas que utilizan GLP, las que operaban con rendimientos de 75%, por calderas a Biomasa (pellets) con rendimiento de 88%.
Este cambio de tecnología y combustible significó una reducción de costos importante para la empresa, ya que el GLP es más caro que el combustible alternativo utilizado. Además, al ser una industria que regularmente realiza poda de sus plantaciones, generaría la oportunidad de autoabastecerse energéticamente.
